Familiares y amigos del fiscal suspendido de Samaná, Robert Justo, acusado de acoso sexual acudieron hoy a la Procuraduría General de la República a defenderlo de las acusaciones.
Niegan que el magistrado haya abusado de su poder para acosar a más de 10 mujeres en su mayoría empleadas de la Fiscalía.
Atribuyen las acusaciones a la procuradora adjunta María de la Cruz, quien según alegan está detrás del puesto del fiscal.
La próxima audiencia disciplinaria contra Justo está pautada para el seis de junio.