Fueron dejados en libertad los 6 caza talentos de béisbol acusados de trata de peloteros cubanos para traerlos al país y lograr que las Grandes Ligas lo firmen, a fin de cobrar alrededor de un 20 por ciento del monto del contrato.
Según el expediente era una red de delincuentes que traía a jugadores de manera ilegal al país a través de lanchas.
Clara Castillo, jueza suplente del tribunal de atención Permanente del Distrito Nacional, impuso contra el cabecilla de la supuesta banda una garantía económica de 500 mil pesos, presentación periódica e impedimento de salida.
Mientras los entrenadores Edgar Mercedes y Pedro delgado fueron separados del caso, pese a formar parte del grupo al que se le ocupó evidencias que de acuerdo al Ministerio Público comprometen su responsabilidad penal en tráfico de personas.