Sin dudas San Valentín dinamiza la economía, a pesar de que se celebra antes de la quincena en la calle se sienten las emociones de esta festividad.
Cada vez que se conmemora una fecha donde se muevan “los sentimientos, que deben ser principios de la convivencia humana”, nos revestimos de una aureola de bonanza, de amor, de paz y por un buen rato nos comportamos algo diferentes, y esto es lo que se siente en las calles de Santo Domingo, la gente se olvida de los problemas económicos y donde sea busca el dinerito para agradar al ser amado.
El día de San Valentín es calificado por muchos como un día comercial, y ciertamente los comercios afilan sus cañones en vísperas del 14 de febrero, una realidad que es obviada por muchos que creen en la magia de este día y dedican todos sus esfuerzos a celebrarlo.
El día de San Valentín es una celebración tradicional que ha sido asimilada por la Iglesia Católica Romana con la designación de San Valentín como patrón de los enamorados. Se hizo popular en muchos países, y en tiempos modernos especialmente en los anglosajones expandiéndose a otros lugares a partir del siglo XX.